Amor versus Conflictos- Capítulo 6
Sasha volvió a su casa llorando a mares por la decisión de Colin. Ella lo amaba y quería volver con él, pero Colin no estaba dispuesto a perdonarla. Al día siguiente decidió visitar a su amiga Amy para contarle su desgracia.
_ ¿Así que no quiso volver con vos?_ preguntó Amy cuando Sasha le conto lo sucedido.
_ No, no quiso. Le di millones de argumentos, pero ninguno lo convenció. Ya no me ama.
_ Fue una lástima que terminaran. Hacían una hermosa pareja.
_ ¿Qué hago ahora, Amy?
_ Disculpá que te lo diga, pero creo que lo mejor que podés hacer es dejar que el tiempo pase para olvidarlo.
_ Está bien, Amy. Gracias de todas maneras.
Pero Sasha nunca olvidó a Colin. Los días transcurrían y a pesar de que ella trataba de tapar su dolor trabajando y saliendo con sus amigas, no lograba sacar a Colin de su cabeza y su corazón.
Un mes después...
Colin cultivó un plantío de maíz y planeó cosecharlo el 2 de mayo a las 16 horas. El 1º de mayo, Sasha miraba la tele y de pronto, en el informativo anunciaban que al día siguiente había tormenta eléctrica. En ese instante Sasha sintió que su intuición le decía: "La cosecha de Colin se arruinará otra vez. Tenés que ayudarlo" Entonces, al día siguiente, a las 14 horas fue a casa de Colin y esperó a que fueran las 15:30. Luego, se acercó al plantío, arrancó todas las mazorcas de maíz y las puso en una caja de madera que había decorado con un corazón. A continuación, entró sigilosamente en la casa de Colin y dejó la caja sobre la mesa. Después entró en el cuarto de baño y dejó la puerta entornada para ver que sucedería cuando Colin se levantara. Tal como había predicho el informativo, a las 16 horas empezó a llover torrencialmente, con relámpagos y truenos ensordecedores. Al oír aquellos truenos, Colin se despertó bruscamente, y gritó desesperado:
_ ¡Mi cosecha! ¡Se va a arruinar!
Salió corriendo sin importarle que estuviera en pijama y abrió de par en par la puerta, y cuando vio que el maíz no estaba en el plantío, lanzó un grito desgarrador. Entre sollozos, cerró la puerta y se volvió hacia la mesa. Abrió la caja y el corazón le saltó de alegría cuando vio todas las mazorcas intactas.
_Oh, no puedo creerlo!_ exclamó_ Me encantaría saber quién generosamente me ha hecho este maravilloso favor!
_Fui yo_ dijo Sasha, caminando hacia él.
_ Mil gracias, Sasha_ dijo Colin_ Fuiste muy buena.
_Podemos ser amigos?_ preguntó Sasha.
_Supongo que sí_ aceptó Colin.
_ Fue una lástima que terminaran. Hacían una hermosa pareja.
_ ¿Qué hago ahora, Amy?
_ Disculpá que te lo diga, pero creo que lo mejor que podés hacer es dejar que el tiempo pase para olvidarlo.
_ Está bien, Amy. Gracias de todas maneras.
Pero Sasha nunca olvidó a Colin. Los días transcurrían y a pesar de que ella trataba de tapar su dolor trabajando y saliendo con sus amigas, no lograba sacar a Colin de su cabeza y su corazón.
Un mes después...
Colin cultivó un plantío de maíz y planeó cosecharlo el 2 de mayo a las 16 horas. El 1º de mayo, Sasha miraba la tele y de pronto, en el informativo anunciaban que al día siguiente había tormenta eléctrica. En ese instante Sasha sintió que su intuición le decía: "La cosecha de Colin se arruinará otra vez. Tenés que ayudarlo" Entonces, al día siguiente, a las 14 horas fue a casa de Colin y esperó a que fueran las 15:30. Luego, se acercó al plantío, arrancó todas las mazorcas de maíz y las puso en una caja de madera que había decorado con un corazón. A continuación, entró sigilosamente en la casa de Colin y dejó la caja sobre la mesa. Después entró en el cuarto de baño y dejó la puerta entornada para ver que sucedería cuando Colin se levantara. Tal como había predicho el informativo, a las 16 horas empezó a llover torrencialmente, con relámpagos y truenos ensordecedores. Al oír aquellos truenos, Colin se despertó bruscamente, y gritó desesperado:
_ ¡Mi cosecha! ¡Se va a arruinar!
Salió corriendo sin importarle que estuviera en pijama y abrió de par en par la puerta, y cuando vio que el maíz no estaba en el plantío, lanzó un grito desgarrador. Entre sollozos, cerró la puerta y se volvió hacia la mesa. Abrió la caja y el corazón le saltó de alegría cuando vio todas las mazorcas intactas.
_Oh, no puedo creerlo!_ exclamó_ Me encantaría saber quién generosamente me ha hecho este maravilloso favor!
_Fui yo_ dijo Sasha, caminando hacia él.
_ Mil gracias, Sasha_ dijo Colin_ Fuiste muy buena.
_Podemos ser amigos?_ preguntó Sasha.
_Supongo que sí_ aceptó Colin.